Estamos ante el tiempo, un tiempo estanco que tiñe todo lo que rodea en un engañoso juego que oscila entre un aullido descarnado y la preciosidad pictórica del Romanticismo.
La luz tenue que atraviesa la niebla no oculta nada. Muestra el verdadero carácter del lugar fotografiado sin disfrazarlo con ningún fuego de artificio. La luz es el catalizador que permite ampliar el paisaje finito que nos brinda nuestra percepción.
En la captación de esta serie David Salcedo ha optado por la sencillez formal, para reforzar la intencionalidad y la expresión de la luz, evitando en todo momento engañar al ojo.
La figura está en un segundo plano en las imágenes. Lo importante en ellas es el ambiente y la atmósfera que se respira en el lugar. La arquitectura es una mera y accidental anécdota.
Fecha: Del 5 de noviembre al 11 de diciembre de 2010
Lugar: Espacio 2 de Kowasa Gallery, C/ Mallorca 235, 08008 Barcelona (mapa)
Precio: Entrada gratuita